Existen distintos tipos de juegos con los que los más pequeños de la casa se pueden divertir. Pueden jugar solos o pueden jugar acompañados, entre todos ellos siempre tendrás un tipo de juego específico que sea nuestro favorito. Por eso hoy mismo queremos hablarte de los juegos dirigidos por qué tal vez, por el nombre no te suenen y quieras empezar a practicarlos.
¿Qué son los juegos de niños dirigidos?
La base principal de todo niño es jugar y disfrutar de distintas actividades para que pueda desarrollarse y relacionarse con más niños de su alrededor. El juego es la mejor y más divertida herramienta para que los niños puedan aprender y adquirir ciertas habilidades que de otra manera sería más complicado conseguir. Podemos destacar dos tipos de juegos: el juego libre y el juego dirigido. Vamos a hablarte de este último para que lo conozcas de buena mano y obtengas toda la información.
¿Qué es el juego dirigido?
El juego dirigido son aquellos juegos en los que hace falta la presencia de un adulto. Esto es porque cuenta con un fin y unos objetivos que hay que conseguir muy concretos y específicos. Estos son acordados con anterioridad al juego y de manera previa. Eso sí, ajustados a las edades de los participantes para que puedan alcanzarlos todos.
¿Por qué es bueno el juego dirigido?
Como todas las actividades, aportan una serie de ventajas y de beneficios para todos los niños que te explicamos a continuación:
- Es un juego organizado con las pautas establecidas desde el primer momento. Es decir, no se pierde el tiempo de manera innecesaria porque las reglas están fijadas y no da opción a improvisar nada. Esto es bueno para que los niños sepan respetar las normas y todos los condicionantes del juego. Además, no se pelearán porque saben cada uno lo que pueden hacer y lo que no.
- Son juegos que tienen alternativas a la hora de empezar a practicarlo. Puesto que se pueden emplear en el colegio en una asignatura o puede hacerse en el parque con los amigos. Aunque esté dirigida por un adulto no significa que sea más aburrida de lo normal o que no sea bueno para los niños.
- El adulto está para corregir errores, es decir la presencia de una persona mayor es bueno para el transcurso del juego. También, hará que los niños no discutan ni se peleen por ciertos aspectos del juego.
- El juego dirigido hace que no se pierda interés en todo momento y que el niño esté concentrado para poder jugar bien y llegar al objetivo antes que los rivales. Ofrece poder poner nuevas normas e introducirlas para poder variar los objetivos finales.
- Logra fomentar la solidaridad y el compañerismo entre los niños.
Como has podido comprobar, son todo ventajas y beneficios para todos aquellos que jueguen a los juegos dirigidos. Ponte manos a la obra y comienza a desarrollar uno para jugar con tus niños y con sus amigos más cercanos.