Ser padres no es tarea fácil, los niños son muy sensibles, sus emociones están en pleno desarrollo y su inmadurez hace que vean el mundo de forma muy diferente a como lo vemos los adultos. Es por esto que aunque amemos a nuestros hijos más que a nada, debemos demostrárselo en todo momento, incluso cuando nos tenemos que despedir de ellos.

Por qué no despedirte de tu hijo cuando te vas es una mala idea

Por qué no despedirte de tu hijo cuando te vas es una mala idea

¿Por qué es esto importante? Los psicólogos coinciden en que el momento en que uno de los padres se ausenta puede causar trastorno en los pequeños, tales como:

  • Sentirse inseguro: los niños muy pequeños no entienden por qué su papá o mamá se marchan de su lado, y no pueden entender los motivos, es por eso que lloran y se sienten angustiados.
  • Tener sensación de abandono: no es extraño pasar por una guardería y escuchar los llantos desesperados de los niños pequeños que no entienden por qué sus padres los dejan allí con un total desconocido.
  • Tener sentimientos de culpa: los pequeños pueden sentir que quizás han hecho algo mal y por eso sus padres se marchan.

Por estas razones, a veces los padres se marchan sin despedirse pensando que así evitan que se sientan mal, pero es un gran error, ya que no despedirse empeora el estado de ánimo del pequeño y sus emociones.

¿Qué podemos hacer entonces para que la despedida sea más llevadera?

Cuando nos vamos a separar de los más pequeñines que no entienden aún de razonamientos, podemos dedicar un momento a darles un abrazo, caricias un beso, en definitiva mostrarles todo nuestro afecto para que vean que los queremos a pesar de dejarlos en la guardería o el cole, en casa de los abuelos, con un canguro, etc.

Mostrarles que son muy queridos e importantes para nosotros, y cuando regresamos recibirlos de igual manera. Cuando perciban que tienen todo nuestro cariño les será más soportable acostumbrarse a las ausencias.

¿Cómo despedirnos de los más mayorcitos?

En el caso de los niños pequeños que tienen ya capacidad para entender el lenguaje, debemos explicarles por qué nos tenemos que ausentar, así evitamos que se sientan abandonados o culpables.

Podemos explicarles las razones por las que tienen que ir al colegio, cómo se van a beneficiar de estar con otros niños y tranquilizarles diciéndoles que muy pronto los vamos a recoger.

También podemos expresarles que nosotros también nos ponemos tristes cuando no estamos juntos, pero que los papás tienen que trabajar para poder comprar la comida, ir al supermercado, etc. Con explicaciones sencillas, podemos fomentar en ellos la confianza y la buena comunicación.

¿Qué hay de los adolescentes?

Si hemos fomentado la buena comunicación con nuestros hijos y nos despedimos cariñosamente de ellos siempre, cuando lleguen a esta etapa de la vida en la que van buscando su independencia, habrán aprendido que despedirse es importante y explicar a donde vamos también. Sin duda genera confianza en los pequeños y tranquilidad en los padres cuando nuestros hijos adolescentes se ausentan.