La comunicación es una actividad humana natural. La comunicación es una parte integral de la existencia humana, ya sea oral o escrita, y, por tanto, toda organización necesita comunicarse. Es posible desarrollar actividades entre los miembros que participan en una institución u organización.

En la actualidad, están surgiendo nuevos elementos de diversas formas de comunicación en la educación que van más allá de la transmisión de información y forman parte del proceso de interacción e intercambio entre profesores, alumnos, padres y administradores educativos.

La comunicación como base en la educación

La comunicación como base en la educación

Estrategias

Comunicación efectiva cuando son pequeños

Comunicarse eficazmente con los niños cuando son pequeños. Los padres y los hijos deben familiarizarse con la comunicación. Los padres deben empezar a comunicarse abierta y eficazmente cuando los niños son pequeños. Esto puede lograrse si los padres responden a las preguntas y hablan con sus hijos. Además, los padres pueden crear el entorno adecuado para una comunicación abierta si son totalmente cariñosos, comprensivos y aceptan a sus hijos. Los niños que se sienten queridos y aceptados por sus padres tienden a confiar sus sentimientos, pensamientos y miedos.

Comunicarse a nivel del niño

Los padres deben tratar de utilizar un lenguaje adecuado a la edad de sus hijos, que puedan entender. Para los niños más pequeños, se pueden utilizar palabras sencillas. Por ejemplo, los niños pequeños entenderán mejor si se les dice “No pegues a tu hermanita” en lugar de “No pegues a tu hermanita”. Los padres deben ser conscientes de lo que entienden sus hijos y no tratar de comunicarse de una manera que los niños no entiendan.

Aprende a escuchar correctamente.

Escuchar es una destreza que hay que conocer y practicar. La escucha es una parte muy importante de la comunicación eficaz. Cuando los padres escuchan a sus niños, demuestran que se interesan por ellos y que los escuchan.

Mantener conversaciones breves

Cuanto más pequeños son los niños, más difícil les resulta escuchar largas charlas. Una buena regla general es que los padres hablen con sus hijos durante 30 segundos y luego les hagan preguntas o les pidan su opinión sobre lo que han hablado. El objetivo es transmitir la información a los niños de forma gradual y asegurarse de que prestan atención y entienden lo que se les dice.

Intenta dar una explicación completa.

Al responder a las preguntas de los niños, los padres deben darles toda la información que necesiten, incluso sobre cosas con las que no se sientan cómodos. Esto no significa que los padres deban entrar en todos los detalles. Es importante que los padres sepan cuánta información necesitan sus hijos y se la den.

Hablar, hablar, hablar. Esta es la única forma en que los niños aprenden a hablar: escuchándote. Sin embargo, si quiere acelerar el proceso, hay algunas cosas que puede hacer.

Como cuidador principal, usted es la principal fuente de información para que su hijo aprenda sobre el mundo que le rodea y cómo interactuar con él. La comunicación con su hijo a través de las palabras, el tacto y el contacto visual crea un vínculo especial y fomenta su desarrollo social, psicológico y espiritual.